Que Upton Park es un estadio que desprende aroma de fútbol no es ninguna noticia, pero yo lo pude notar este fin de semana en mi primer partido de Premier en vivo, y aprovecho la ocasión para contar esta inolvidable experiencia.
Tras una agitada mañana en el mercado de Portobello (Notting Hill), donde recomiendo ir a todos aquellos que visitéis Londres en alguna ocasión, por fin llegaba el momento de partir hacia Upton Park para disfrutar del West Ham – Aston Villa.
Tres horas antes del partido bajé al “Underground” para cruzar toda la línea Disctrict en dirección a la parada Upton Park. Las camisetas hammers empezaban a aparecer conforme las paradas de metro se acercaban al destino. Empezaba a notarse el ambiente que esperaba. Pero un contratiempo provocó que varias paradas antes el metro parase y nos informasen a todos de que tendríamos que hacer uso de unos autobuses de reemplazo para llegar al estadio.
Al llegar al lugar indicado para coger el autobús, una larga cola sobresalía de la parada. Nervios. No quería correr, quería disfrutarlo, quería sentirme hammer por un día. Pero rápidamente los nervios se transformaron en emoción al ver la marea de camisetas granates y azules que se dirigían dirección a Boleyn Ground.
Una vez en la zona del estadio, los seguidores abarrotaban pubs e ingerían cerveza –previsiblemente desde hacía ya algunas horas- antes de dirigirse dirección a Upton Park.
Yo aproveché para comer una hamburguesa y apuré los últimos minutos “libres” en la tienda hammer, donde compré la camiseta con la que iba a seguir intensamente el encuentro, y para hacerme alguna foto de rigor con las dos torres de la entrada.
Camisetas de Parker, de Noble, de Cole, de Obinna, etc. y muchas de Moore me rodeaban y confundían a mis sentidos, que querían estar en todas partes y que intentaban seguir el frenético ritmo de los minutos previos de un partido en la entrada del estadio.
Ya uniformado, crucé la puerta de entrada al estadio. ¡¡Ya estaba en Upton Park!! Pasillos estrechos, puestos de comida, las alineaciones en pantalla y un montón de gente charlando sobre los que jugaban y los que no lo hacían. Me decepciona no ver a Parker. Me duele no ver a Sears aunque lo esperaba. Pero aún así tenía pensado disfrutar al máximo del partido.
I'm Forever Blowing Bubbles sale de las voces de los miles de aficionados hammers y hace vibrar las gradas. Yo, en pie, me emociono. Pelos de punta mientras intento seguir la letra. Bárbaro.
El partido no puede empazar mejor y tras algo más de un minuto, Robbie Keane adelanta al West Ham y el estadio estalla. Grito al unísono de los miles de aficionados que llenaban las gradas de Upton. Con una sonrisa que llenaba mi cara me acomodo en mi asiento y veo como el aficionado que tengo al lado sufre conforme pasan los minutos y el Aston Villa se hace con el control. Me pega esos nervios. ¡Me muerdo hasta las uñas!
El Villa empata –gol de Bent tras un fallo garrafal en defensa- y la cosa se pone fea. “Good news” hablan en los asientos traseros y escucho a algunos aficionados como hablan de que Blackpool y Blackburn van perdiendo. Los nervios crecen y se nota en alguno de los cambios realizados por Grant, que no es entendido por los aficionados.
En el descuento llega el segundo de los villanos. El estadio se levanta y se marcha decepcionado mientras una nutrida afición llegada desde Birmingham grita enloquecida en la gradas hasta muchos minutos después del pitido final. Yo me marcho. Mi sueño se ha cumplido. Pero ahora como hammer, toca sufrir y pelear por evitar el descenso.
Come on you Irons!!
Os dejo un par de videos para que disfruteis del ambiente. Espectacular!
Me alegra ver cómo Upton Park cautiva el corazón de todo aquel que lo visita. Al leerte, has conseguido que sienta lo mismo que sentí yo cuando estuve en The Boleyn. Es una pena que todo ese romanticismo vaya a desaparecer con el Estadio Olímpico. Y esperemos no estar en The Championship...
ResponderEliminarUn saludo Tomás!
Lo del descenso tiene muy mala pinta...
ResponderEliminarUn abrazo!
¿Cuánto e costó la camiseta del equipo?
ResponderEliminarMucho menos que en España, si no recuerdo mal fueron unos 30 euros.
ResponderEliminarno podemos ir al olímpico, antes tiene que arder Londres. Upton Park es el parque de Londres y the Boleyn Ground es la gran catedral del proletariado hammer. Nunca podemos abandonar nuestra casa.
ResponderEliminarpenyabogarde-goldencorner.blogspot.com