miércoles, 7 de septiembre de 2011

Primeras conclusiones de la Axpo Super League

Cuando muchas ligas aún están empezando o ni tan siquiera lo han hecho, la Axpo Super League en Suiza ya cuenta con siete jornadas, y eso quiere decir que cada uno de los equipos ya se han enfrentado a siete de los nueve rivales que tendrán a lo largo de la temporada. Por lo tanto, y antes de estar un tiempo en el que permaneceré en fuera de juego, intentaré sacar las primeras conclusiones.

El liderato de un modesto

El líder firme es el F.C. Luzern, que como ya nos viene acostumbrando, arranca las temporadas con mucha fuerza y luego utiliza ese colchón a final de temporada para poder dormir tranquilo en esas noches de mayo en las que te juegas la temporada. La pasada campaña arrancó con siete victorias en las diez primeras jornadas de liga, en las que solo cedió una derrota. Este año, en las siete primeras jornadas, su balance es de cuatro victorias y tres empates, sin conocer aún el sabor de la derrota. Y estos resultados son los que de momento le mantienen al frente de la clasificación.

Una de las claves del buen rendimiento del equipo entrenado por el mítico Murat Yakin está en la defensa. Ha encajado tan solo 3 goles (un promedio de 0,42 goles por partido) y los centrales Sarr y Puljic están demostrando de momento un dominio del área sencillamente espectacular. Además, siempre bien acompañados por una de las sensaciones del campeonato, el lateral izquierdo Lustenberger.

En la medular destacan un Nelson Ferreira que a parte de colaborar en la distribución, cuenta con unas incursiones por su banda –normalmente la izquierda- que están llevando de cabeza a muchos defensas, y además podemos ver a jugadores de enorme potencial como el pivote defensivo Kryeziu (18 años) o dos jugadores que se prodigan más en ataque como Alain Wis (21), que es uno de los que más me ha gustado en el equipo en lo que va torneo, y Winter (25), que se compenetran a la perfección con la experiencia del veterano Hakan Yakin, que sigue dejándonos detalles de mucha clase. Pese a que en los últimos tiempos nos tiene acostumbrados a bajar el pistón pasada la primera parte de temporada, este modesto equipo parece que por fin ha confeccionado una plantilla que puede llevar al club a pelear por posiciones europeas.

Thun, Servette y Sion superando las expectativas

Por detrás en la tabla aparecen Thun, Servette y Sion, tres equipos que por el momento están superando con creces el rendimiento esperado, pero a los que espero ver algo más abajo con el avance del campeonato.

El Thun ha perdido al que para mi ha sido el jugador más importante en lo que va de campaña, Stephan Andrist, que ha fichado por el Basilea, y eso puede ser un lastre importante. Por el contrario, su capacidad ofensiva seguirá siendo alta mientras siga la racha del veterano Lustrinelli, que está bien secundado por el recién llegado Schneuwly, siempre peligroso en sus incorporaciones al ataque. Abajo, el tardío fichaje del central tunecino Ghezal puede dar solidez a la zaga. Me parece que por el momento su rendimiento está por encima de lo que se podía esperar.

El recién ascendido –y también histórico- Servette, se ha encontrado con un inicio de temporada que ni los más optimistas esperaban, y todo eso gracias a un sistema que a veces parece un tanto anárquico y que pese a que les está haciendo encajar muchos goles, también les está permitiendo anotar algunos más. Para cerrar el agujero defensivo han traído en el último día de mercado al central portugués Roderick Miranda, un jugador con una proyección brutal y que viene de ser pieza clave en el subcampeonato de la selección lusa en el Mundial Sub20.

Arriba han encontrado a varios jugadores inspirados como Vitkieviez, Ismael Yartey o el que para mi ha sido mejor hombre en el ataque del conjunto de Joao Alves, Goran Karanovic, que tuvo su mejor actuación en la espectacular remontada del Servette en campo del Zürich –iba perdiendo 2-0 y acabaron ganando 2-3- y donde mostró sus mejores armas, un posicionamiento excelente y una capacidad para definir más que notable.

El Sion es otra de las sorpresas de la temporada, incluso en la Europa League, donde pese a la posterior sanción, consiguió eliminar al Celtic de Glasgow. Si tuviese que destacar a un jugador no tendría duda, sería el central húngaro –a veces lateral- Vanczák, autor de 4 goles, todos ellos claves en la consecución de puntos. Pero el buen hacer a nivel defensivo de Serey Die o la enorme capacidad ofensiva del medio Obradovic tampoco se han quedado atrás. Para colmo cuentan con un jugador por el que suspiran equipos destacados de Europa –el último que mostró su interés fue el Udinese-, el delantero Giovanni Sio y uel renacido Pascal Feindouno, que desde que le permitieron jugar sale casi a gol por partido.

Los grandes sufren en el inicio de temporada

Antes de empezar el campeonato hice una previa en la que puse como candidatos a Basilea, Young Boys y Zürich en este orden. Sigo pensando que así será, pero de momento no están cumpliendo para nada con los pronósticos iniciales y se están dejando un buen puñado de puntos.

En estos momentos los tres equipos están empatados a nueve puntos, pero con sensaciones bastante opuestas.

El Zürich está siendo irregular a más no poder y además da una sensación de fragilidad defensiva que empieza a poner el miedo en el cuerpo de los aficionados de esta rica ciudad. En defensa solo podríamos destacar al lateral zurdo hispano-suizo Ricardo Rodríguez, el mejor jugador en este inicio de campaña, mostrando intensidad atrás y prodigándose mucho y de manera muy acertada en ataque. Tanto que han sido varios los partidos donde el técnico ha prescindido de un extremo por esa banda. Los otros titulares: Teixeira, Phillipe Koch y Beda están muy por debajo del nivel esperado.

Sin embargo, la parte positiva es el potencial que muestran arriba, y es que tienen la suerte de contar con uno de los jugadores de mayor talento de esta Superliga Suiza, el sueco Dusan Djuric, que se está moviendo de manera sublime entre líneas y además de anotar, está surtiendo de múltiples pases a los puntas. Por sensaciones, Mehmedi y Chermiti deberían acabar siendo los titulares, aunque la lesión del tunecino ha dado la oportunidad a Alphonse, y éste la está aprovechando.

El Young Boys por su parte, tiene la que para mi es la mejor plantilla del campeonato. Así de claro. Pocos puntos débiles se pueden encontrar en sus líneas, sin embargo dos derrotas seguidas en las semanas en las que se jugó su futuro europeo, lo han dejado en mitad de tabla. Su posición natural será la de luchar por el campeonato, y pese a haber apostado antes del comienzo por el Basilea, creo que el Young Boys no sorprendería a nadie si ganase esta liga.

Los de Berna cuentan con un portero de garantías, Wölfli, que sonó incluso para el Palermo como sustituto de Sirigu. En la zaga, los cuatro titulares son de garantías: Zverotiv o Sutter, Nef, Veskovac y Lecjaks de derecha a izquierda. En la medular Farnerud está haciendo un trabajo memorable y cubre las espaldas a un Silberbauer que se ha adaptado a la perfección a su nuevo equipo. Además, jugadores como Mayuka, Costanzo o Degen han alternado actuaciones de altísimo nivel. Arriba es donde parecen tener más problemas, con un Ben Khalifa que pese a que no podríamos decir que ha empezado mal su nueva etapa, es cierto que la carencia de gol es un lastre a valorar, y a lo que hay que sumar la pérdida de Bienvenu, su hombre gol la pasada temporada.

El Basilea es el equipo que particularmente más dudas me ha despertado. Lo tenía como uno de los favoritos y lo sigue siendo, aunque cada partido que juega baja un escalón en mi particular apuesta.

Encajan muchos goles, y la pareja de central Kovac-Dragovic parece que no acaban de compenetrarse. Y a eso hay que sumarles la preocupante falta de gol de sus dos delanteros titulares, Frei y Streller, que ya han sido criticados por esta circunstancia. Y para suplir esa carencia han fichado a unas de las sensaciones en el inicio de temporada, el mencionado Stephan Andrist, que pese a no ser punta, se incorpora con peligro y ha conseguido ya cuatro tantos.

Sin embargo cuentan con el que posiblemente sea el mejor jugador de la liga, Xherdan Shaqiri, que pese a no empezar muy entonado, parece que poco a poco va cogiendo ritmo, y tal y como demostró con la selección suiza esta semana, es un jugador que puede ganar partidos él solo. Este factor junto al retorno de Granit Xhaka son las mejores noticias para un Basilea que a partir de ahora debería empezar a sumar de tres en tres.

Por la parte baja, el Grasshopper parece que no va a tener un año fácil y ha demostrado mucha debilidad en casi todos sus partidos –perdió el derbi de Zürich por 6-0 frente a su eterno rival-. El lateral izquierdo Bruno Bertucci, uno de los fichajes de esta temporada, no da el nivel, mientras que en el medio campo el “veterano” De Ridder no consigue tampoco rendir conforme a los esperado. Además la pérdida de su jugador franquicia, Innocent Emeghara, que se ha marchado al Lorient, puede ser más importante de lo que parece. Solo destacaría, aunque tímidamente, al centrocampista izquierdo Zuber.

Caso a parte es lo del Neuchatel Xamax, que se las prometía felices tras la llegada del magnate chechenio Bulat Chagaev y algunas de sus nuevas “estrellas”. Pero tras siete jornadas la inestabilidad del club es extrema y ya suman dos entrenadores caídos (Ciccolini y Joaquín Caparrós) además de algunas bajas de jugadores un tanto repentinas y múltiples salidas de tono del magnate.

Aunque dentro de ese clima de tensión es complicado rendir, las recientes llegadas de Arizmendi, Kalu Uche o Haris Seferovic deben mejorar el rendimiento global de un equipo que tan solo ha sido capaz de anotar cuatro goles –son los menos goleadores- y del que solo hemos visto algunos detalles de Víctor Sánchez y de Wüthrich. Su posición debe ser más arriba si el “jeque” empieza a comportarse, sino podrían sufrir mucho durante el año.

Finalmente el Lausanne es el equipo con diferencia, más débil de la competición , y al que todos dábamos como candidato número uno al descenso. Va a sufrir mucho pero hemos visto algunos partidos que son un atisbo para la esperanza, como la victoria frente al Zürich con un partido excelente de Roux, el mejor del equipo, demostrando tener una excelente capacidad para el remate y la definición. Pese a que la esperanza es lo último que se pierde, me parece el equipo con más números para acabar en la Challengue League Suiza.

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