viernes, 24 de enero de 2014

Dos extremos y un destino

El mercado invernal en la Superliga Suiza no ha sido especialmente fructífero, de hecho, podríamos decir que hasta ha sido de los más parados de los últimos años. Sin embargo, se han poducido dos bombas que hacen de este mercado, uno de los más sonados de los últimos tiempos.

Ambas bombas tienen muchas cosas en común, y es que las salidas de Mohamed Salah (Basilea al Chelsea) y de Izet Hajrovic (Grasshopper al Galatasaray) guardan los siguientes paralelismos:


1. Se marchan dos de los jugadores que acaparaban más focos, dos de las estrellas emergentes (incluso ya consolidadas) de más renombre de la Superliga y dos de los jugadores más resolutivos del campeonato. De hecho es bastante probable que veamos al bosnio en el Mundial y si Egipto estuviese en esa cita, Salah formaría parte, sin duda, de los seleccionados.

2. Ambos desempeñan sus funciones en el extremo diestro del ataque de sus equipos, con condiciones y tipo de juego similares. Es cierto que Hajrovic tiene mejor golpeo de balón y se prodiga más en el lanzamiento de media distancia, pero ambos son jugadores eléctricos, desequilibrantes y descarados en el uno contra uno.

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3. Ambos debilitan a equipos de la parte alta de la tabla. Hay que recordar que la Superliga Suiza está apretadísima y hay solo 4 puntos entre el primero (Basilea) y el quinto (St. Gallen), con el Grasshopper colocado a tres puntos del liderato. Perder a "jugadores franquicia" puede se importante de cara a la segunda vuelta y seguro que así lo verán los rivales que más regulares se han mostrado, Young Boys y Luzern.

4. Las salidas de ambos muestras una dinámica que se viene dando en en la Superliga desde hace algunas temporadas. Los jugadores pacientes y que no se precipitan, salen preparados para retos mayores (Shaqiri, Ricardo Rodríguez o Drmic como ejemplos de lo dicho). Los dos han recalado en equipos, aunque diferentes, con aspiraciones idénticas, en octavos de final de la Champions y peleando por el título liguero en su país, o lo que es lo mismo, equipos con cierta relevancia a nivel doméstico y continental.

Parece claro que el torneo helvético pierde atractivo con estas dos salidas, tan claro como que estos jugadores tenían las horas contadas en Suiza. Ahora toca esperar para ver si Basilea y Grasshopper mueven ficha con lo ingresado y tratan de tapar el agujero dejado por ambos.

martes, 7 de enero de 2014

Servette: En busca del camino de vuelta a la Superliga

Le costó arrancar en su vuelta a la segunda categoría y solo pudo sumar una victoria en las cuatro primeras jornadas de campeonato, pero desde aquel momento su trayectoria ha ido in crescendo y ahora es incluso, el máximo candidato al ascenso. 

Este Servette sigue sin ser un equipo con enormes recursos como ya demostrase la temporada pasada en la Superliga, pero con algunas diferencias (lógicamente hay que contextualizar y lo que eran limitaciones en la máxima categoria, no lo son tanto en Challenge League). Aún así, la primera diferencia es la defensa. En este apartado han conseguido encajar muy pocos goles y pese a que tampoco es que se muestren excesivamente seguros (ha habido partidos que parecía increíble que su rival acabase sin marcar) se mantienen en cifras excelentes con menos de un gol (0,77) encajado por partido. 

Tréand y Dams celebran un gol

La segunda, es que ha conseguido incorporar a algunos jugadores que estaban muy infravalorados en sus equipos y que necesitaban de confianza para rendir como son el delantero Roux (ex Lausanne), el talentoso Crettenand (ex Sion) y el punta o segundo punta Igor Tadic (ex St. Gallen). El primero llegó tras un pasó extraño por Lausanne, en el que pese a sumar goles y buenas actuaciones con cierta regularidad, nunca fue indiscutible y se quedó muchos partidos en el banquillo. El segundo lo hace tras jugar en el Sion y dar muestras de calidad en un equipo que pretendió conquistar Suiza y por poco le cuesta la vida. Mientras que el último llega tras tres años extraordinarios en el Kriens y dar el salto a un St. Gallen donde no tuvo oportunidades. Ahora vuelve a la categoría en la que se confirmó como el buen goleador que es. 

Equilibrio y talento para la mitad de cancha

Un doble pivote formado por dos jugadores jovencísimos como son Doumbia y el capitán (pese a la juventud) Pasche. Ellos son los encargados de mantener el equilibrio y dar libertad a los de arriba. Por delante, una línea de tres con jugadores que probablemente podrían jugar en la Superliga. El contundente Tadic por detrás del punta, Crettenand por la izquierda dando muestras de su buen toque de balón y de su magnífico golpeo y por encima de todo, el galo Geoffrey Tréand en el costado derecho, que está mostrándose absolutamente resolutivo en ataque y que hace de cada partido una muestra de talento, suma a mitad de curso la nada desdeñable cifra de 9 goles y 5 asistencias y es posiblemente -junto con Rossini (Schaffhausen)- el jugador más resolutivo del campeonato.

Como referencia ofensiva, el mencionado Roux secundado por el jovencísimo togolés Placca, que contagia el entusiasmo cada vez que salta al campo y que ya se ha estrenado como goleador en la categoría. 

Sus rivales por el ascenso en el segundo tramo de temporada (Vaduz, Schaffhausen y Wil) se han reforzado con jugadores que podrían (y deberían) aportar valor añadido a sus equipos, mientras que ellos parece que mantendrán la plantilla actual. La lucha será reñida y es probable que se prolongue hasta las últimas fechas. Ahí, el Servette deberá tirar de la experiencia de algunos de sus buques insignia. Para mi, el principal candidato aunque no anda, ni mucho menos, sobrado. 

Once tipo